viernes, 27 de marzo de 2015

2do. Cuento: CIERVO IRISADO -CHINA-


Sigamos con el viaje entre maravillas y tradiciones en el mundo, ahora daremos una gran vuelta a globo terráqueo y compartiremos un hermoso cuento, no si antes recordar que se hacen referencia como debe ser de las referencias bibliográficas correspondientes, y comentar que la presente publicación se realiza A MODO DE BRINDAR ENTRETENIMIENTO Y CONOCIMIENTOS CULTURALES DE DIVERSOS PAÍSES Y ES SIN FINES DE LUCRO. Aclarado el punto continuemos:


CIERVO IRISADO
 (1983). 
Ediciones de Lenguas Extranjeras.
Beijing, China.
- FRAGMENTO -

“Allá por los tiempos del famoso “Camino de a Seda” que surcaba el mar de arenas que hoy conocemos como desierto de Gobi, las caravanas de comerciantes y diplomáticos persas portando mercancías y presentes avanzaba al ritmo de los camellos, desde el Oeste hacia el Este.

En alguna de aquellas ocasiones, una caravana fue sorprendida por un funesto vendaval; luego, el cielo se echó su manto espeso para comenzar a invadir los arenales con las sombras y la ventisca. Jinetes y camellos forcejeando contra la adversa naturaleza perdieron el rumbo.

A la situación embarazosa se unió el frío penetrante que obligó a fundirse en un ovillo a hombres y animales que procuraban abrigo.

Por suerte, en aquellos tiempos la era de los prodigios sobrenaturales aún no había llegado a su fin. Los destellos de una aureola iluminaron el espacio inundado por  las notas de una melodía celestial. En la lejanía, los viajeros en desgracia pudieron distinguir un extraño y bonito ciervo irisado.

Ante tan extraña aparición, la perplejidad se apoderó de los viajeros.

En un abrir y cerrar de ojos, la lejana figura desapareció para volver a aparecer, esta vez, entre los caminantes. “Ustedes, amigos-dijo el ciervo irisado-vienen a esta tierra desde lugares muy remotos. Les serviré de guía.” Los caminantes agradecieron el gesto hospitalario del cervatillo inclinándose ante él.

El ciervo irisado, con la cabeza erguida, danzo de un lado a otro haciendo que la nieve se levantara del piso.

Como un reguero de pólvora, se fue abriendo un camino salvador que se perdía en el horizonte. Desde la cima de una colina el ciervo irisado despidió con su balar profundo a la agradecida caravana nuevamente en marcha.”

¿Qué pasara con la caravana? ¿Llegara a su destino? y el hermoso ciervo  ¿será respetado o perseguido?

Continuemos en otra ocasión hablando sobre tan bello cuento.




Para ambientar les dejo un breve y hermoso vídeo que muestra parte de la tradicional

 Opera de Beijing:






domingo, 22 de marzo de 2015

1er Cuento: "EL SEÑOR QUE NO QUERÍA PONER OFRENDA". MÉXICO.

Iniciaremos esta aventura literaria con un breve cuento tradicional, la finalidad es brindar mayor conocimiento sobre el tema del Día de Muertos en México y a su vez nos ayudara a conocer detalles que seguramente desconocemos, disfruten de:


"El señor que no quería poner ofrenda
 (In tlacatzintli tlen amo oquinequia tlamanaz)"
Extraído de :  Navarrete Gómez, Pablo Rogélio (2009). Antología: Cuentos Náhuatl de la Malintzin.



"Aquí en nuestro pueblo en el mes de noviembre celebramos una
fiesta a los difuntos. Nuestros antepasados, nuestros abuelos,
creían que regresan esa noche los muertos a sus casas aquí en
este mundo, y prueban todos los guisos que se les colocan en la
ofrenda. También se les ponen flores, pescado seco, frutas y
muchas otras cosas.
Una vez en nuestro pueblo pasó que un hombre no creía que
venían las almas de los difuntos y no quería poner ofrenda.
Cuando ya se aproximaba la fiesta de difuntos no ponía nada de
ofrenda.

Llegó el día de la fiesta de difuntos y dice: para qué voy a
estar ofrendando? Porque no es verdad que vienen los muertos; no
es verdad. Su esposa dice: Si voy a poner una ofrenda aunque sea
una tortilla. El señor le responde: Haz lo que quieras.
Luego dice el señor: no me voy a quedar aquí, mejor me voy
al bosque a traer leña. No quiero ver esta dizque fiesta de
difuntos. Ni es verdad. El señor se fue al bosque. Allá estaba
buscando leña y se subió a un árbol de ocote muy grande. No vio
bien como pisaba y una rama se rompió y se resbaló. Luego se
pegó en el árbol y se desmayó. Cuando volvió en sí, allí está
colgando. Así pasó todo ese día y toda la noche. Como no podía
soltarse, así se quedó colgando.

Al siguiente día escuchó que por ahí iban pasando muchas
personas, y dice: les voy a gritar y les voy a decir que me ayuden.
Busca y busca pero no ve a nadie. Escuchaba como que venían
pero no veía a nadie. Otra vez también así se escucha y el señor
espera ver a alguna persona, pero nadie aparece. El señor creyó
que pasarían por donde estaba y le ayudarían. Se golpeó la
cabeza, estaba muy débil y no pudo zafarse.
Dice: ahora ¿cómo le voy a hacer, cómo regresaré? ¿a quién
le voy a gritar? Escucha de nuevo que viene mucha gente
subiendo y platicando. Se pregunta: ¿quiénes serán, quienes
serán? Ahora sí los ve a lo lejos, ahí van pasando todos los
difuntos, ahí van subiendo las señoras y los señores, todos van
cargando un ayate lleno de frutas. Van comiendo van platicando y
van riendo muy contentos.
Luego vio más atrás y ve que ahí van sus padres que viene
recogiendo las sobras que tiran otros difuntos. Sólo recogen las
sobras que encuentran tiradas. No llevan nada. Otros llevan en
su mano una vela; llevan fruta y se van riendo. Pero sus padres
no llevan nada, ahí van tristes y sólo recogen las sobras de lo que
tiran otros difuntos.
Cuando ya todos han pasado empieza a amanecer. Allí
temprano pasaba un joven que había ido a traer puntas de pino
secas para el baño de vapor. Vio al señor colgado en el árbol y le
ayudó a bajar. Cuando ya está abajo dice ahora sí creo. Ahora
creo que vienen los difuntos. Sí es verdad que vienen. Vienen a
comer en la fiesta de difuntos.

Al siguiente año puso una ofrenda con mucha fruta y se fue
nuevamente al bosque a ver el paso de los difuntos. Nuevamente
ve a muchos como van riendo, platicando y comiendo su fruta.
Ahora sí vio a sus padres que ahí van bien contentos comiendo su
fruta y lleva lo que les pusieron en la ofrenda.
Ya no andan recogiendo las sobras que otros tiran. Ahora el
señor anda diciendo que sí es verdad que vienen los difuntos en
su fiesta. Vienen a probar los platillos que se les preparan y se
los llevan a su mundo. Así se van caminando contentos.
Aquí termina este cuento"

La tradición del día de Muertos, es uno de los eventos tradicionales que más se celebra en la mayor parte de nuestro país, resaltado su particular belleza y tradición en ciertos estados de la República Mexicana:









Y para cerrar con "Broche de Oro" se enlaza el siguiente documental realizado por Canal 13C CHILE, que presentan un reportaje más que completo sobre tan bella tradición mexicana, disfruten:






Muchas gracias por su visita, pensemos juntos sobre las siguientes cuestiones:

 ¿Qué  he leído y visto aquí que no conozco?¿Me gustaría ir a algún lugar tradicional para celebrar el día de muertos?¿Qué lugar me gustaría visitar?¿Qué lleva más comúnmente una ofrenda?¿Es diferente la ofrenda para los niños con respecto a la de los adultos?


Me encantará saber sus respuestas, pensamientos, comentarios y observaciones. 

BIENVENIDA



INICIEMOS ESTE VIAJE EDUCATIVO Y CULTURA POR EL MUNDO, SIEMPRE ACOMPAÑADOS POR CUENTOS INFANTILES Y ALGUNAS TRADICIONES DE CADA LUGAR DE NUESTRO HERMOSO Y COMPLEJO PLANETA